martes, 29 de julio de 2008

PRIMER ALCALDE DE PAZOS

Cultura es un conjunto de valores materiales y espirituales donde todos los pobladores de Pazos deberían conocer cómo fue el pasado, el presente y velar por el futuro de nuestro distrito. Pasaron muchas generaciones desde que Pazos fue reconocido primero como comunidad y luego como distrito, pero para eso tuvieron que existir líderes comunales que trabajaban ad honoren para el progreso del pueblo.

Alfredo Quilca Romero, uno de los personajes muy reconocido y con una carrera política muy amplia y reconocida, es uno de ellos.

Pazos le agradece la manera en que lideró esta comunidad para convertirla hoy en un distrito pujante y progresista, que actualmente ya cuenta con un presupuesto general aproximadamente 222 mil soles mensuales, fuera de los ingresos propios.

Don Alfredo Quilca nació el año de 1925, cuando Chuquitambo todavía un caserío. Sus padres fueron Don Víctor Quilca Castillón y Doña Nicolasa Romero Vila; y fue el primero de seis hermanos. Sus estudios Primarios lo realizó en la Escuela Estatal 511 de Huancayo.

La familia Quilca vivía en el Anexo de Tongos y luego llegó a vivir en Pasto Pampa a consecuencia de que tenían su estancia y que en esa época había litigio por Lindero entre Pucará y Sapallanga y los comuneros de Tongos tenían que posesionar los terrenos a cambio de aporte económico. Por eso, al agotárseles el dinero recurren a José Santos Quispiñicas Soto, para solucionar el problema de marcación de Lindero con los Wancas, y los que vinieron a posesionar ya no regresaron al Pueblo de Tongos, especialmente la Familia Quilca, y poco a poco las chozas fueron aumentando.

Así se constituye la comunidad de Pazos, siendo creada el 08 de enero de 1912 con Decreto Supremo Nº 1529 y como distrito gracias a la las gestiones de las autoridades. Su creación distrital fue el 11 de enero de 1951 y a consecuencia que la resolución salió el día 15 de marzo con la concurrencia de toda la comunidad en general y participación del Diputado por Huancavelica en aquel entonces RAUL MARTÍNEZ ZUSUNAGA se hizo la inauguración. Don

Don Alfredo manejó con mano dura todos los aspectos de la vida distrital haciendo participar a la comunidad en diferentes obras, como la actividad productiva, la educación, la salud y el deporte, ligándose a las autoridades superiores y siempre tomando decisiones en coordinación con la población.

Como todo nuevo distrito para su buen funcionamiento hubo muchas necesidades para lograr el desarrollo, lo primero que hizo fue construir el Local Municipal, luego el Local comunal; la iglesia que solo era una capilla se construyó, la torres en concreto y el resto del local con adobe; también hizo conocimiento en público que el terreno que ocupa la Plaza fue propiedad de su Abuelo Santos Quilca, pero éste donó cuando todavía Pazos era una Comunidad Campesina.

Otras de las obras resaltantes fue la instalación de una pileta de agua potable en la Plaza, y en los tres barrios más principales, eso fue un gran avance para Pazos, pues la gente que vivía alrededor de la Plaza ya no tenía que ir más hasta los puquiales a traer agua para cocinar sus alimentos.

Mandó, también a construir el nuevo local de la escuela, que de igual manera fue hecho mediante un canje de terreno por otro; en seguida con mucha gestión logró construir y crear la Posta Médica donde también no había lugar y tuvo que hacer cambio de terreno de la comunidad con un poblador para ubicar el Local, que ahora está funcionando en la actualidad como Centro de Salud de Pazos.

Todo eso fue logrado durante su primer periodo entre 1951-1957. Don Alfredo cuenta que Pazos seguía avanzando, los alumnos de la escuela después de la Promoción se quedaban sin seguir la secundaria, unos que otros salían hacia Pucará o Huancayo a seguir pero la mayoría se quedaba por falta de recursos económicos y conjuntamente con toda la comunidad acordaron crear un colegio. Para ello, tenían que construir el local. Nuevamente, no había lugar para su buena ubicación e hizo canje del terreno de la Comunidad con Don Alejandro Capcha, un total de 1,000 mts cuadrados, asi lo crearon y funcionó con el nombre de Colegio Estatal “RAUL PORRAS BARRENECHEA”, eso fue el año de 1964 donde actualmente es alma máter del Distrito de Pazos. Éste fue uno de los logros de su Segundo Gobierno Municipal en el periodo de 1963-1966.

Luego fue elegido por elecciones Municipales en el periodo de 1967-1969. La carrera Política que tuvo Don Alfredo fue muy larga ya que durante toda su vida se dedicó en velar por el progreso del Distrito. Fue nombrado, también, Personero Jurídico y legal de la comunidad indígena de Pazos en el año de 1958, y fue ratificado como Presidente del Consejo de Administración de la Comunidad Campesina de Pazos, en 1971 hasta 1972, CONCECOM, al igual que fue Juez de Paz; el año 1980, y fue Gobernador en dos oportunidades en 1981y en 1982. Finalmente, fue presidente de electrificación del Distrito, y secretario General del Partido de “Acción Popular” donde trabajó muy ligado al ex presidente de la República Arq. FERNANDO BELAUNDE TERRY”.

Para su comunicación con las sedes de Educación, Salud e Incluso con el mismo congreso de la República lo hacia mediante el Telegrama, debido a que no había Teléfono ya que en estos últimos 10 años la Telecomunicación recién hizo ver su avance en los zonas Rurales.

Don Alfredo fue reconocido con honores al término de cada uno de sus cargos por la abnegada y entusiasta labor.

Muchos pobladores reconocen la personalidad y la genialidad de Don Alfredo, dicen: “Él era el único que emprendía obras, en beneficio de un barrio o del mismo Distrito; estaba dispuesto cada vez que se tenía que pedir una orientación o preguntar si está bien o no tal proyecto”.

Así es que por la experiencia y la carrera política que él manejaba en esa época fue muy respetado por todos los pobladores, esa labor y experiencia que dejó Don Alfredo debe servir como guía y lección de trabajar por el futuro de la niñez, y el progreso de Nuestro Distrito. Actualmente a sus 83 años de edad todavía se nota su semblante y ganas de ayudar y aconsejar a sus descendientes y a los que se dedican al futuro de la Política del distrito de Pazos.

Foto: Diputado Raul Zuzunaga recibido por alcalde en la inauguración del distrito de Pazos.

Artículo de Elena Romero publicado el 16 de febrero de 2007 en el sitio web de ERTIC bajo el título "Alguien que no debe pasar por desapercibido".

miércoles, 23 de julio de 2008

CONOCIENDO PAZOS


HISTORIA
El poblamiento en la sierra central se inició de 20 000 a 9 000 años a. c., en el periodo paleolítico al norte de Huancavelica, departamento de Junín, en la cueva de Pachamachay, abrigo rocoso de Telarmachay (Tarma), cueva Pana Lauca (Junín) y la cueva Uchumachay (Junín), al sur de Huancavelica, en el departamento de Ayacucho la cueva de Piquimachay, Puente y Ccayhuamachay; estas ocupaciones, en diversos puntos, cuentan con cronologías y están apoyados por fechados radio carbónicos.

Estos vestigios corresponden a la etapa cazadora-recolectora pero en forma selectiva, tanto de plantas como animales, evolucionando, en el periodo Arcaico, a una aldea de pastores de llamas y alpacas en las punas de Junín y Tarma. Warivilca y Sapallanga en el sur de la quebrada del Mantaro correspondiente al periodo de Desarrollos Regionales. en el devenir histórico, Huancavelica fue ocupada por gente de tradición Pre Agrícola y a partir del primer milenio los Huancavelicanos son portadores de civilizaciones ancestrales.

Al finalizar la expansión Tiahuanaco - Huari, los Pockras de Ayacucho formaron una confederación con los Chancas, los Wancas y los reinos locales como los Angaraes, que frenaron el avance de los Incas del Cusco durante 50 años, hasta que Pachacutec los conquistó y los anexó. El territorio huancavelicano, habitado por tribus de la familia Chanca, se incorporó al Chinchaysuyo, el cual tuvo gran importancia estratégica por su ubicación, construyéndose numerosas avanzadas, edificios y asentamientos urbanos como el gran centro Incawasi ubicado a 20 km de Huaytará.

Al no tenerse exactitud sobre el origen de los pobladores de Pazos, es responsabilidad de las autoridades y pobladores rescatar su historia, en el inventario realizado en los talleres de diagnóstico local se encontró sólo un punto de interés arqueológico que son los restos arqueológicos de Kutupata, que pueden desentrañar la historia de Pazos, se presume que todos estos pueblos cercanos al gran valle de Mantaro pertenecen a la familia Huanca, ya que en la actualidad sus usos y costumbres son Huancas y su vinculación comercial natural por la cercanía fue siempre con Huancayo y no Huancavelica.




TURISMO
En el distrito de Pazos existe un gran potencial de recursos turísticos como las vistas panorámicas del valle desde diferentes ángulos. Asimismo, existen expresiones folklóricas diversas, fiestas costumbristas asociadas con platos típicos como la pachamanca, cuchi canca (asado de lechón), mondongo, patachi, picante de cuy, entre otros.

En el ámbito Distrital no existe infraestructura de servicios turísticos como hoteles o albergues. Hay cuatro restaurantes con deficiente infraestructura que brindan pensión a los foráneos que trabajan en el distrito. La visita se hace desde la ciudad de Huancayo, que sí cuenta con estos servicios, y como tal, los pobladores de esta zona, son los más beneficiados económicamente.

La actividad turística en el distrito tiene posibilidades de desarrollo, siempre y cuando puedan ofrecer una infraestructura mínima en alojamiento, restaurantes y mantenimiento de carreteras de tal manera que la estadía de los turistas en el distrito de Pazos sea grata y recomendable.


FESTIVIDADES
Los aspectos más visibles de la expresión cultural en Pazos son las fiestas tradicionales, que constituyen la ocasión para practicar las diferentes manifestaciones costumbristas.
El calendario festivo se inicia con la fiesta del "Año Nuevo", que se festeja el 1° de Enero de cada año, donde participan los danzantes de tijeras, que es una manifestación propia de la provincia de Tayacaja en oposición a la dominación cultural de los españoles.

Entre los meses de febrero y marzo se festeja la fiesta del carnaval en todos los anexos, la cual se realiza al acorde de los rondines y quenas. Esta fiesta es centralizada en la capital del distrito durante 3 días donde se desarrollan concurso de comparsas.
FUENTE: Sitio web ERTIC - INICTEL
Documental sobre artesanía textil elaborado por ERTIC

miércoles, 16 de julio de 2008

LA FIESTA DE SANTIAGO: TAYTA SHANTI

INTRODUCCIÓN
Entre las fiestas campesinas, la que más llamó la atención de Sergio Quijada Jara, (Acostambo - Tayacaja, 1914-1990), fue sin duda la del Santiago. A ella le consagra una sección en su libro “Estampas Huancavelicanas” y una buena porción de las “Canciones de ganado y pastores”; y finalmente, un opúsculo que se titula “Taita Shanti” (1974), donde reúne canciones y partituras sobre la mencionada fiesta.

Santiago es la imagen que mas difusión tuvo en América. En el libro “Santiago en América” de Rafael Heliodoro Valle, hace el registro de las ciudades que llevan su nombre (mas de 200); las iglesias que están bajo su advocación; las estatuas, cuadros, bajorrelieves y escudos existentes a lo largo del continente; y las leyendas, tradiciones y fiestas que están asociadas con su figura. Santiago fue el santo mas propalado en los primeros años de la Conquista. Las fiestas dedicadas a este santo son incontables en diversos pueblos del Perú. Sin embargo no todas las celebraciones tienen el mismo carácter. Así, en el Valle del Mantaro es relevante la figura de ecuestre del santo apóstol; pero no en los pueblos de Huancavelica, donde bajo su advocación formal, en verdad, se rinde culto a las antiguas deidades prehispánicas (a esta fiesta se le denominaba antes “tinyanacuy”).

DESCRIPCION
El 25 de julio de cada año, se realiza esta fiesta que no es sino del ganado de los pastores, teniendo como base la creencia de considerar al TAITA HUAMANI, como dios y señor de los cerros. En lugares más cercanos a las grandes poblaciones, los campesinos veneran al apóstol Santiago encendiéndoles ceras en víspera de la fiesta y conservando la imagen en bulto, en muchos casos en su típico caballo blanco, con su sombrerito de vicuña y ponchito andino. En cambio en otras comunidades de mayor densidad poblacional campesina también festejan con el nombre de Santiago, pero lo que mas les interesa realizar en la “pagapa” u ofrenda que le deben rendir al cerro mayor, o a la tierra, porque aún obran con carácter panteísta pensando que dentro del cerro, en el fondo de la tierra está el TAITA HUAMANI o TAITA ORCCO, o señor de los cerros.

El antropólogo José Matos Mar en su trabajo titulado: ”La fiesta de la herranza en Tupe”, señala que esta fiesta se realiza anualmente para marcar el ganado, costumbre introducida por los españoles; cada dueño debe poner con un hierro caliente sus iniciales en el anca de las reses. Es la señalización de la propiedad individual. Los antiguos peruanos no conocieron esta forma de marcar sino otra: “hacer una señal en los auquénidos, los únicos animales conocidos por ellos, que consistía en colocar lanas de colores (cintas) en sus orejas. Esto hace pensar que nuestros antepasados dedicaban determinados días del mes de julio a festejar a sus animales y pastores después de las cosechas de sus productos.

Para mitigar su tragedia, esperan con ansias el 25 de julio, por ser la fiesta de sus animales a los que están íntimamente ligados de alma y corazón. En esta fecha experimentan las dolorosos gotas de sus sentimientos a través de las letras de los cantos que el ingenio de sus mentes creadoras han tejido con exquisita sensibilidad, recogiendo el bello colorido poético, el eco de la misma naturaleza que convertidos en emotivos poemas sirven de solaz a sus almas nobles y puras como las aguas de sus puquiales

INSTRUMENTOS USADOS
Las cornetas mas antiguas y propias de estas fiestas han sido y son de “mamac”, de “yungur” o “llongor”, cuya dimensión exacta es de una brazada y un codo de largo, que crecen en los bajíos, o en lugares cálidos o cejas de montaña; hay también de carrizo o de chonta blanca, que no es sino de maguey o de ágave, además existen cornetas de cacho en forma espiral llamadas waqra pucu”. Las cornetas son tocadas por varones, y la tinya por las mujeres. Este es un pequeño tambor confeccionado de piel de oveja o de gato. Lo golpea con un palito teniendo la punta envuelta con un pedazo de trapo o cuero que toma el nombre de “tinyaco” o “huaqtaco”.

FLORES DE ADORNO
Es interesante anotar que los comuneros se dirigen a las altas punas y quebradas inaccesibles donde crecen flores silvestres de variados colores. Esas flores son “lima lima”, “ccantu”, “huaman sara”, “ccori huaylla”, “cuchip chupan”. etc. Para obtenerlas, deben ir en grupos llevando su “pagapa” al cerro. Este ritual consiste en enterrar un pequeño mate o una olla pequeña de barro llena de caramelos, pasas, coca, una pequeña botellita de vino y otra de aguardiente. Con esto se asegura que el dios del cerro no enviará tormentas para destruir las flores.

LA VISPERA
Una vez listas las cosas que se utilizarán el día central, en la víspera se realiza el “velorio” que consiste en velar esos objetos, mientras los concurrentes chacchan hojas de coca, beben y bailan. Pero también salen de paseo entonando algunos cantos, a visitar la casa de parientes, amigos y familiares, quienes deben recibirlos con algunas copas de licor y chicha.

A las doce de la noche, o sea el “chaupi tuta” algunos designados por el jefe de familia, levantan con suma veneración todas las cosas que han velado y ofrecen en un pequeño mate como ofrenda al taita Huamaní o taita orcco o cerro.

EL DIA CENTRAL DE LA FIESTA
En la madrugada se realiza el “Pachahuala” o “Lucy Lucy” que quiere decir amanecer. En ese momento todos los concurrentes encienden mechones de paja nativa o el ichu de la puna, ingresando al redil o corral, simulando pelar la pelambre o lana de los animales cuya creencia, es para ahuyentar la mala suerte que les cubre y anunciándoles que es su gran día.

Después de pasar toda la mañana bailando, cantando y comiendo, se dirigen nuevamente al corral de los animales a desenterrar las cintas, previamente enterradas, y entre los asistentes es repartido puñados de hojas de coca para realizar el “Coca quintoy” o “quintoy acllay”, indicándoles que ellos, representan a los pastores. Los invitados escogen la coca que han recibido, separándolas las hojas sanas grandes de las más pequeñas, equivalentes a los carneros grandes y sus crías.

Luego de un breve intermedio, el mayordomo solicita la devolución de las hojas por orden de edad. Cada hoja representa diez unidades de ovejas. Se premia a la mayor cantidad de “ovejas” entregadas, representado en las hojas de coca

Mientras se van juntando el ganado que será “marcado” los invitados bailan al son de cornetas de aluminio o de cacho llamados waqra pucus. El uso del “LLongor” en Tayacaja está bastante difundido en todos sus distritos aún más alejados.
Igualmente, los concurrentes beben el huarapo de la caña traída de pequeños fundos lejanos, o los diferentes preparados de caña, como el “pito” hecho a base de Kiwicha, brebaje muy temido por conocedores por los efectos causados al organismo.

LA MARCA O SEÑAL
Después del medio día los dueños del ganado, proceden a colocarles las cintas de lana de variados colores, en la orejas de los animales hembra, mientras los músicos van dedicándoles alusivas canciones.

Después de terminar de colocarles las cintas a los animales hembras, colocan a los animales machos: carneros, toros, burros, caballos etc. sus “hualljas” (especie de corona que contienen pequeñas frutas, panes etc.) y las personas mas ancianas son invitadas para arrojar harina de maíz a los lomos de los animales, así como a los concurrentes, para que los animales se conserven sanos y aumente el ganado.

Después, algunos pastores son premiados por los dueños de los animales para que mantengan interés en el pastoreo del ganado. Durante la ceremonia hay inclusive la costumbre de realizar el “matrimonio” que consiste en lo siguiente: si la cría de la vaca es hembra, entonces después de colocar las cintas en las orejas de la vaca, simulan hacerla acostar, o hacerla dormir, o hacerla “casar” con un hombre soltero. Se tiene la creencia que esa ternerita crecerá robusta, que se encariñará con el lugar, y no padecerá de enfermedad alguna. Y si la cría es macho, igualmente simulan hacerla casar con una mujer.


Tomado del Libro: FOLKLORE PERUANO: DANZA Y CANTO
Autor: Antonio Muñoz Monge
Ediciones: Educación a Distancia: (Universidad Inca Gracilaso de la Vega 1991)
Artículo: TAITA SHANTI (por Sergio Quijada Jara)
Editado por: SAPOSAQTA

sábado, 12 de julio de 2008

EL RITUAL DE LA COCA


Sergio Quijada Jara, tiene una obra intelectual valiosa que lo hace acreedor al reconocimiento y a la alabanza de todos nosotros. Según el registro de Alberto Tauro del Pino en la Enciclopedia Ilustrada del Perú, (Lima, 1987), el autor nació en Acostambo, provincia de Tayacaja en 1914; estudió Derecho en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, donde se recibió de abogado en 1945, ejerciendo su profesión en la ciudad de Huancayo.

En Sergio Quijada Jara hay que admirar a uno de los primeros recopiladores de la cultura popular de nuestra región y uno de los iniciadores de la literatura narrativa. Mostró el paisaje y el entorno social, a través del relato y el cuento, y de recuperar la tradición nativa del pueblo, mediante la compilación de cuentos, leyendas, canciones y la descripción de costumbres, como se puede apreciar en sus primeros libros.

En 1960 Quijada Jara publicó un libro, La coca en las costumbres indígenas, donde describía con bastante detalle, los ritos nativos en los que la coca tiene un papel determinante. Este trabajo logró apenas circular entre los folkloristas como un dato empírico, pero no como un tema de estudio y reflexión. .

Con este libro Sergio Quijada Jara se anticipó largamente en el descubrimiento del valor ritual, cultural y antropológico de la coca, tema hoy bastante estudiado por los científicos sociales. El autor expone los empleos que tiene la llamada hoja sagrada en la vida cotidiana del campesino. Quijada Jara se limita a dar algunas muestras, las suficientes para llegar al convencimiento de la entrañable función que poseía esta planta en el mundo andino

El autor comienza mostrando la función de la coca en el TRABAJO. De acuerdo con su información, ella sirve de reconstituyente de las energías físicas perdidas, e incluso de sustituto del alimento según creencia extendida, Pero, por encima de todo dice, la hoja de coca es un medio de concertar las diversas relaciones de trabajo colectivo como el ayni y la minka. Por otra parte en las faenas difíciles y arriesgadas, digamos abrir una zanja, para un cimiento o un canal, es necesario ofrendar antes a la tierra una hoja o un puñado de coca, a fin de preservar del daño.

En el VIAJE la coca ayuda a aliviar el cansancio y también para adivinar la perspectiva feliz o adversa y propiciar un viaje venturoso mediante la paga (el Jachulajay) a la montaña, a la cueva o al río. Muchos años después, Catherine A. Wagner ha hecho el análisis sistemático de estos mismos ritos (“Coca y estructura cultural en los Andes peruanos”), Allpanchis Nº 9 (1976) y Baldomero Cáceres ha ofrecido un resumen del estado de la cuestión en “Perjuicios y versión psiquiatrita del coqueo andino” (1985).

El uso de la coca en la MEDICINA POPULAR podría haber dado lugar a un inacabable repertorio de fórmulas, pero el autor se limita a reseñar algunos casos, acompañándolos de informes sobre investigaciones científicas que justifican esa práctica racional. Destaca asimismo la función de eje social que la coca tiene en los matrimonios, velorios y “lavatorios”. Y el papel central que juega en la representación mágico-fiscalizadora, en la fiesta del ganado llamada quintuy coca, cuyo sentido profundo y milenario, es propiciar la reproducción del ganado, y hacer el registro de los animales por parte del propietario, en su sentido más moderno.

Teniendo la coca tanta importancia en la vida social, obviamente debía ser motivo predilecto de la poesía y de las adivinanzas. En éste libro Sergio Quijada Jara ofrece un conjunto de composiciones en versión original quechua y la introducción correspondiente al español, realizada por el mismo autor, con bastante libertad. En los textos incluidos, se advierte que algunos son de creación o reelaboración última y que sus autores anónimos estuvieron ya muy influidos por la cultura dominante. Así lo revela la interferencia del léxico español notoriamente profusa en algunas canciones. El mismo huayno “Coca quintucha”, que, según el autor ”tiene paternidad de siglos”, delata que es de elaboración colonial o, tal vez, republicana. Sería, por eso, interesante analizar en que medida las composiciones citadas expresan el sentir originario del pueblo andino. Ya nos ha prevenido José María Arguedas que el “sentimiento cósmico de la soledad”, por ejemplo - que aparece en algunos cantos quechuas, como el mencionado – tiene data muy reciente y corresponde a los campesinos desarraigados de su medio.

Tomado del Libro:
Folklore: BASES TEORICAS Y METODOLOGICAS
Artículo: Sergio Quijada Jara y la Cultura Popular Andina
Autor: Manuel J. Baquerizo
Lluvia Editores (1991)

martes, 8 de julio de 2008

RAIMONDI EN TAYACAJA


Antonio Raimondi en Tayacaja, reproduce fielmente los apuntes y observaciones de este cientifico cuando en 1866 llega a Tayacaja en el marco de su ejemplar itinerario por los caminos y pueblos del Perú.

El sabio italiano Antonio Raimondi nació en Milano un 19 de setiembre de 1826, y llega al Callao un 28 de Julio de 1850, huyendo de los horrores de la guerra por la independencia y unidad de Italia.

Acicateado por la obra de los botánicos españoles Hipólito Ruiz y José Pavón y del alemán Alexander Von Humboldt viaja incansablemente por espacio de 19 años, investigando los recursos naturales de nuestra patria. Costa, sierra y selva fueron recorridos con amorosa devoción, superando enfermedades tropicales, parasitosis, neumonías y otros malestares, además de las dificultades climáticas y de transporte.

Raimondi fue decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos y Conservador del Museo de Historia Natural .

Los valiosos frutos de sus acuciosas investigaciones se publicaron en el libro “EL PERU” itinerario de viajes que aparece en 1874 en sus tomos I, II y III.

Muere el 26 de octubre de 1890 en San Pedro de Lloc en el departamento de La Libertad. Su nombre y su ejemplo se agiganta en el corazón de los peruanos.

Edición preparada por Carlos Zúñiga Segura

Presentamos el recorrido del sabio Antonio Raimondi por Tayacaja.

Día: 3 de setiembre de 1866
DE HUANCAYO A PAMPAS (12 leguas)


Hora
8:35 Salida de Huancayo con dirección al SE
8:43 Al terminar la población, se pasa por un cause sobre un puente y se continúa por terreno muy llano, con dirección hacia el S 50º E.
9:15 A la derecha y a un buen cuarto de legua de distancia, está el pueblo de Huamanmarca.
9:30 Se pasa por el pueblo de La Punta que tiene aspecto muy ruinoso. Plantas de Aliso y Quisuar.
9:40 Se pasa un cause seco que baja de NE a SO y luego otro mas pequeño.
9:52 Se pasa por otro cause seco. Plantas de Solanum (Cusmallu) y pequeños berberis.
10:00 Se pasa un cause con arroyo y luego se entra al pueblo de Sapallanga. Plantas de Quinuar y Sauco.

Termómetro libre: 13.7
Termómetro barométrico: 15
Gay Lussac: 424.5

En este pueblo las casas están diseminadas y hay una iglesia que queda a la izquierda, cerca de los cerros.
Plantas: Guindo, Quinual, Pereskia, Motoy, Solanum (Cusmalla), Agave y Dunalia en frutos. Al terminar el pueblo, se pasa por unos rústicos ranchitos.
10:25 Mojón. Plantas de Solanum (0rmish)
10:32 Se pasa un cause con arroyo que baja de E a O
10:40 Llegada a Pucará.
Termómetro libre: 14.2
Termómetro húmedo: 7
Termómetro barométrico: 16
Gay Lussac: 521
Cielo: Sol
Pucará en un pueblo de regular extensión, situado en la falda de un cerro. En este punto hay numerosos árboles de Quinual, Quisuar (buddlein incana), Aliso y Manzano, que dan un aspecto pintoresco. El camino es algo pedregoso y sube faldeando unos cerros de calcáreo cubiertos de terreno de aluvión.
10:58 Se sube sobre terreno de aluvión amarillento con dirección al S. SE. Plantas de Motoy, Quinual, Solanum (Cusmalla) y Mutisin de flores amarillas.
11.06 Se continúa al SE.
11:12 Al S 50º E El camino es casi llano.
11:20 Mojón. Plantas de Pereskia y Colletia.
11:27 Se sube faldeando con dirección al S 40º E. El camino no es muy inclinado.
11:39 Plantas de Pereskia y Motoy. El camino sigue paralelamente a la quebrada que se pasó abajo, antes de subir al pueblo de Pucará. Esta quebrada dista del camino una media legua.
11:52 Al S 50º E se sigue por la banda izquierda de una quebradita que se une mas abajo con la precedente.
12:00 Casitas con pequeños cultivos que están regados por el hilo de agua que baja a la quebradita.
12:10 Mojón con un nicho para cruz.
12:20 Repartición del camino. Se marcha por el de abajo. El que sube va a Ñahuinpuquio. Se sigue por terreno casi llano. A la izquierda baja una quebradita que es otra ramificación de de la que se pasó antes de entrar a Pucará.
12:38 Mojón con techo para la cruz.
Termómetro libre: 13.7
Termómetro barométrico: 15.5
Gay Lussac: 481.2
12:47 Continuando la marcha, se baja al S 60º E por la banda derecha de una quebradita. En este punto se ven en la quebradita muchos carneros.
1:06 Quebradita que se reune por la otra banda. En el ángulo que forman los dos arroyos hay una casita.
1: 08 Se continúa al S 75º E El camino es llano y sin piedras.
1.13 Hilito de agua en ambas bandas que bajan a juntarse con el arroyo de la quebrada.
1:20 Siguiendo al S 70º E se deja un camino que baja por la quebradita y se va por otro faldeando y subiendo. Tierras coloradas y blanquizcas que cubren al calcáreo.
1:27 Se pasa un arroyo que viene de S.SE y se sube una cuesta. Se marcha sobre tierra colorada. Hay muchas piedras de gres en el camino. Planta de Colletia.
1:38 Gres en capas casi horizontales. La quebrada que se seguía baja como una legua hacia el NE y después parece torcer al E SE. Se notan en el camino muchas piedras de gres verde que parecen tener cobre.
1:46 Aparece el calcáreo de vez en cuando.
1:52 Roca de gres rojizo en capas verticales.
1:55 Repartición de los caminos de Tongos y de Pampas. Para ir a Pampas, se marcha por el de la derecha. A pocos pasos, a la izquierda de la apacheta, está la choza de un pastor.
1:56 Apacheta.
Termómetro libre: 13.2
Termómetro barométrico: 15
Gay Lussac: 481.4
Cielo: Sol
2:00 Continuando la marcha al S. 50º E. se sigue por un camino llano que está a la izquierda; en este mismo lado, se ve el calcáreo que se apoya al SO. A la derecha se ve la misma roca pero con inclinación contraria, lo que acredita que la estratificación es ondulada y en este punto forma una especie de convexidad, la que se haya interrumpida en su parte superior por haber sido denudada (erosionada).
2:22 Se paso un arroyo que viene del SO. y baja a la izquierda por una quebradita. Se sube faldeando con dirección al E. SE.
2:30 Se faldea la quebrada de Tongos.
2:37 La quebrada de Tongos baja con dirección al N 50º E. Se marcha al S 40º E. El pueblecito de Tongos se haya situado en la banda derecha de la quebrada como a media legua de distancia de este punto.
2:41 El camino sigue las direcciones N, NE y E.
2:46 Al E SE subiendo y faldeando por la banda izquierda de una quebradita que baja a reunirse a la de Tongos, al pie del punto señalado a horas 2:37.
3:15 Pórfido rojizo morado, con muchos cristales blancos. Esta roca es casi estratificada y parece ser producida por metamorfismo.
3:37 Cumbre del camino entre Huancayo y Pampas.
Termómetro libre: 6.5
Termómetro barométrico: 9
Gay Lussac: 464.4
Cielo: Sol
3:50 Se continuaba por un camino casi llano. Roca: gres rojo arcilloso en capas verticales y en la dirección del camino. Se sigue la SE.
4:07 Se baja por la banda derecha de una quebrada. Arcillas coloradas endurecidas, esquistosas, en capas verticales, en la dirección del camino.
4:17 Se sigue al S 40º E. Roca: gres grosero y conglomerado con mucho cuarzo.
4:35 Pequeño trecho de camino malo. Plantas de Sisyriuchum. El camino sigue al S 50º E. Plantas de Baccharis.
4:43 Descanso. Plantas de Chuquirahua con hojas canosas por debajo.
4:50 Continúa la marcha.
4:55 Plantas de Geranium y Calceolaria.
5:10 Plantas de Rubus Vernonia, Itasta, Cassia y Gardoquia. Se baja por camino algo malo en caracol.
5:40 Llegada a la hacienda de Pillo. Esta hacienda se halla situada al pie de la cuesta, en la quebrada de Pampas. Tiene cultivos de cebada y alfalfa, de manera que presta algún auxilio a los transeúntes entre Huancayo y Pampas, pues proporciona alojamiento a los viajeros y pasto para las bestias. Esta hacienda parece ser bastante antigua porque tiene capilla de las que carecen las haciendas modernas.

Día: 5 de setiembre de 1866
DE LA HACIENDA DE PILLO A PAMPAS (12 leguas)

De Pillo a Pampas hay 2 leguas de camino llano, pero este camino está tan mal cuidado que la primera parte es bastante molesta por los muchos charcos de agua y piedras que tiene.
Hora
7:00 Hacienda de Pillo.
7:12 Salida de la hacienda de Pillo con dirección al E. Planta de Berberis, de hojas grandes y Bacharis, de muchas flores.
7:20 Quebrada en la otra banda y se reúne en ángulo agudo.
7:22 Se sigue al E SE. Se ven muchas casitas en la quebrada. Plantas de Motoy en abundancia. El camino continúa por un callejón llano en medio de la quebrada y ladea por terrenos cultivados y casitas.
7:45 Al S 80º E. Se sigue un camino mal conservado e inundado en gran parte por el agua de las acequias laterales.
7:50 Se llega a una quebradita que viene en ángulo agudo por la derecha. La quebrada se ensancha y presenta hermosos terrenos cultivados.
7:56 Se pasa el arroyo que viene por la quebradita. Plantas de Pereskia horrida a los lados del camino.
8:03 Se continúa al N 75º E. Por un camino muy tortuoso. Plantas de Ortiga de hojas lanceoladas. El cultivo principal de la quebrada es la cebada.
8:16 El camino pasa al pie de los cerros por la banda derecha de la quebrada. Se ven plantas de Solanum (Ormish) en abundancia; y la roca es esquisto arcillosa. Se sigue con dirección al N 60º E.
8:25 Los cerritos a los lados del camino están cubiertos de terreno de aluvión colorado.
8:35 En este lugar hay un panteón con dos portadas y una capilla.
8:38 Llegada a la población de Pampas.
Termómetro libre: 6.5
Termómetro barométrico: 9.5
Gay Lussac: 517.3
Cielo: Sol

jueves, 3 de julio de 2008

EXTINCION DE SAPOS EN TAYACAJA


Tayacaja es conocida a nivel regional por la calidad de las papas que producen sus fértiles campos. Ya en 1866 el sabio italiano Antonio Raimondi, en su recorrido por la provincia hacía referencia a las bondades de las papas de la zona de Tocllacuri, como un producto de calidad solo comparable con las de Carabaya (Puno).

Para obtener esta calidad, un pequeño batracio jugó un rol muy importante. Nos estamos refiriendo al sapo, animalillo de piel áspera de color verde, de ojos saltones y extremidades cortas, convertido en el amigo del agricultor por el rol que cumplía al exterminar a los atacantes de las plantas: gusanos diversos, insectos en fases larvarias, gorgojos en sus muchas variedades.

Sin embargo por la década del sesenta, las tiendas que comercializaban fertilizantes sintéticos se multiplicaron en los diferentes pueblos de la región. El agricultor que antes usaba productos orgánicos tipo la bosta de vaca como fertilizante se convirtió en un usuario más de estos centros comerciales que ofrecían sus productos para combatir las plagas de las plantas, además de ofrecer mayor rendimiento y mejor calidad en el producto final.

Los productos químicos utilizados en la elaboración de los fertilizantes sintéticos, con el transcurrir del tiempo, fueron los causantes de la progresiva disminución de los sapos, quedando su población muy diezmada por esta causa.

Y por si esto fuera poco, el diario El Comercio denunció no hace mucho la captura indiscriminada de sapos para fines comerciales como el consumo de supuestos tónicos para combatir enfermedades como la tuberculosis, el malestar cerebral, el cansancio y últimamente la disfunción eréctil.
De esta manera Tayacaja -y algunos pueblos de la sierra central- se han convertido en proveedores de estos batracios para su comercialización en la ciudad de Lima.

Esta práctica de la venta de brebajes en Lima, originalmente se realizaba con las ranas de nuestra serranía, pero que al ir éstas desapareciendo del mercado, comerciantes inescrupulosos optaron por cazar sapos.

Los falsos “naturistas” dedicados a expender estos “preparados”, se llenan los bolsillos a costa de cientos de ingenuos seguidores que creen en las bondades curativas de este inofensivo batracio. El éxito es tal que se expenden un promedio de 200 vasos diarios por puesto de venta en la ciudad de Lima, los que son comercializados por inescrupulosos cazadores a un promedio de medio nuevo sol la unidad.

Esta práctica es inhumana y empieza con los animalillos mostrados uno encima otro en peceras pequeñísimas en los puestos de venta en mercados de Lima y algunas ciudades de provincia. Para preparar la bebida estos sujetos agarran a los sapos de las patas y los lanzan contra la madera para aturdirlos con un fuerte golpe en la cabeza; luego son introducidos al agua hirviendo para poder pelarlos vivos; así moribundos son arrojados a una licuadora que espera impaciente poder triturarlos ante la total insensibilidad de los presentes. Este preparado es acompañado con un poco de jugo de maca y miel de abeja, produciendo un espumoso brebaje, listo para ser consumido sin ninguna mueca por individuos que creen en sus bondades curativas. Algunos “expertos” solicitan agregar a la licuadora en funcionamiento, un huevo crudo, un poco de kiwicha, y una pizca de aguardiente para incrementar su “mágico poder”.

Los campesinos manifiestan que los sapos han sido y son excelentes controladores biológicos, manteniendo los cultivos limpios de insectos que causan enfermedades a las plantas. La desaparición de estos batracios está alterando el equilibrio ecológico con el consiguiente perjuicio para la actividad agrícola.

Solicitamos a las autoridades de Tayacaja dictar dispositivos de protección a favor de estos indefensos y emblemáticos batracios, por su importancia en la conservación del ecosistema y en la cultura local. (MSF)